La negociación y mediación se distingue de otros sistemas alternativos de resolución de conflictos como la conciliación y el arbitraje, se caracteriza por el principio de confidencialidad, neutralidad y facilita que las partes elaboren sus propios acuerdos, no es su función el de aconsejar, juzgar, sancionar o dar respuestas a los problemas. Es un proceso de construcción creativa, crítica y cooperativa.
La negociación y mediación cimenta la construcción de una sociedad pacífica, favoreciendo en las instituciones y las personas que lo conforman en:
Prevención de la violencia.
Aceptación de la pluriculturalidad.
Comunicación creativa y asertiva.
Responsabilidad compartida.
Solidaridad en el bienestar común.
Visión, misión y pensamiento crítico.
Reduce los sentimientos negativos.
Aporta calidad de vida.
Disminuye el proceso legal.